La palabra cuota proviene del latín quota, que hace referencia a una parte fija y proporcional de algo. Este concepto se suele utilizar para nombrar a la cantidad de dinero que se paga de forma regular, ya sea a una suscripción, club, asociación…
Por lo general, las cuotas están pactadas de antemano y se estipula el tiempo que se tiene para pagarla, su periocidad y la cantidad de cada una de ellas. Existen algunos tipos de cuota como puede ser la cuota de crédito o la de mercado.
Las compras a cuotas son aquellas en las que un servicio o producto se paga en diferentes etapas. Por ejemplo, se suelen pagar a cuotas los vehículos. Actualmente es normal que las cuotas vengan acompañadas de unos intereses o recargos. Por ejemplo, puedes comprar un vehículo con un interés del 10% del precio total, por lo que el comprador terminará pagando un poco más al final por la facilidad del precio por cuotas.
Cuando se habla de cuota en el ámbito laboral esta hace referencia a la cotización a la Seguridad social. Se denomina cotización a la Seguridad Social a cada cuota que abonan tanto empleados como empleadores al Estado como aportación. Normalmente, esta cotización corresponde a un porcentaje de su sueldo. Esta retención debe quedar correctamente registrada en la nómina.