El salario no es la única forma de motivar e incentivar a tus trabajadores, existen otras medidas que pueden ayudar a mejorar la satisfacción de tus empleados como el reconocimiento personal, la flexibilidad horaria, la posibilidad de trabajar desde casa o la retribución flexible. La retribución flexible, en concreto es una política de empresa que permite sacar un mayor rendimiento al salario bruto e implica un ahorro importante para el trabajador. Sigue leyendo la guía de retribución flexible profundiza en el concepto, descubre todo lo que puede implicar para tus trabajadores y cómo puedes implementarla.
Cuando hablamos de la retribución flexible hacemos referencia a un sistema retributivo que parte del salario en especies, es decir, que se destina parte del salario bruto a la compra de productos exentos de impuestos como puede ser el servicio de guardería, la tarjeta transporte, los cursos de formación, el seguro médico o el cheque restaurante y que el empleado puede personalizar en base a sus necesidades. En España se estipula que puede abarcar un máximo de un 30% del total del salario bruto anual del trabajador.
Los productos o servicios más frecuentes en un plan de retribución flexible son aquellos que cuentan con ventajas fiscales y que no son considerados rendimientos gravables en el impuesto sobre la renta o que tienen descuentos en el precio.
En función de las necesidades, la situación familiar y personal de cada empleado se puede escoger el mejor escenario para destinar parte de su salario por esta vía y obtener así un ahorro considerable.
Decantarse por un sistema de retribución flexible es una opción atractiva cuando una empresa no puede aportar un gastos añadidos pero busca la forma de mejorar la situación de los trabajadores. Si te estás cuestionando cuáles son las ventajas de un plan de retribución flexible, lee con atención:
Los únicos costes que debe asumir la empresa son los de desarrollo, implantación y administración del plan de retribución flexible. Si se comunica adecuadamente a los trabajadores, la retribución flexible hace más competitiva a la empresa en el mercado laboral. Si quieres implementar un sistema de retribución flexible de forma eficaz y profesional, presta atención, te mostramos cómo hacerlo paso a paso:
En función del perfil de los empleados tienes que analizar las necesidades de los mismo y evaluar cuáles son los servicios que más puedan interesarles, incluso puedes hacer un sondeo o cuestionario de retribución flexible.
Por parte del departamento de recursos humanos y de la empresa encargada de ofrecer estos servicios se realiza una reunión para comunicar el plan de retribución flexible apoyado con material informativo y se utilizan diversos canales de comunicación interna para difundir claramente toda la información. Lo esencial en este paso es explicar correctamente los beneficios que conlleva para el empleado.
En esta fase para implementar un plan de retribución flexible es clave resolver todas las cuestiones que preocupan a los empleados y ofrecer alguna herramienta, como la calculadora de retribución flexible. Es una herramienta que muestra en base a las circunstancias y condiciones de cada uno de los empleados cuál es el ahorro real en función del servicio o producto que le interese más y así obtener el cálculo del ahorro fiscal.
Una vez aclaradas las dudas el último paso es contratar los servicios y realizar un seguimiento mensual para comprobar que todo está funcionando correctamente durante los primeros meses de prueba.
Los encargados del departamento de recursos humanos deben gestionar correctamente el plan y personalizar las nóminas y realizar la entrega de los servicios a cada uno de los miembros de la plantilla.
En conclusión, ofrecer un plan de retribución flexible conlleva para tus empleados un gran ahorro que puede repercutir de forma positiva en la economía familiar y a la vez maximiza el salario neto que mejora la imagen de la empresa como empleador.